El hospital de Jerez, elimina desde el día 6 el Hemográma de Control a las parturientas.

Profesionales de la sanidad publica del hospital de Jerez, han trasladado a IPJ  que la implantación de las  Unidades de Gestión Clínica, solo esta siendo enfocadas a la reducción de gastos hospitalarios, ejemplo de ello es: la eliminación desde el día 6 de Octubre del Hemograma de Control que se realizaba a las puérpedas,  mujeres que han parido el día anterior.

Dichos profesionales resaltan la importancia de estas pruebas analíticas, por la  perdida de sangre que las mujeres tienen cuando dan a luz, prueba de ello, es el tiempo que se lleva realizando dichas pruebas y ahora eliminada de un plumazo achacado a la implantación de las Unidades de Gestión, realizada  desde el Servicio Andaluz de Salud y su política de reducción de gastos que a llevado incluso a la dimisión de alguno de estos profesionales que dirigía alguna de estas Unidades de Gestión, contrario a tales políticas reductivas de servicios.

Según le han trasladado estos profesionales a Antonio Conde, Coordinador General de IPJ, se esta incentivando económicamente a los gestores de estas unidades de Gestión por la reducción de costos, ello a conllevado a una política de control excesivo de material utilizado por estos profesionales para el desarrollo de sus trabajo,  incluso llegándoseles a recriminar por el gasto de dicho material, a la implantación  generalizada de medicamentos genéricos y en algunos casos llegándose a recetar al paciente medicamentos y diciéndoles a los familiares que fueran a una farmacia y los trajeran para su posterior suministro.

Desde Iniciativa Progresista Jerezana, tachamos de lamentable esta política de reducción de gastos en sanidad e instamos al Servicio Andaluz de Salud a reducir gastos en otras partidas presupuestarias que no sean a costa de quitar pruebas realizadas a usuarios y que las Unidades de Gestión Clínica vayan enfocadas a sus originarios objetivos como eran: Fomentar la implicación de los profesionales sanitarios en la gestión de centros, reforzar la continuidad asistencial entre ambos niveles de atención, mejorar la organización del trabajo y elevar la satisfacción de los pacientes y no solo una burda herramienta para reducir costos.